Mendip School es una escuela para alumnado con diagnóstico de autismo y necesidades de habla, lenguaje y comunicación. Los niños y niñas se agrupan de acuerdo a su capacidad y necesidades, no a su edad.
A lo largo de la jornada, hemos asistido a clases como observadoras en sesiones de educación física y lengua de distintos niveles.
Todos los grupos son reducidos en función de sus necesidades y atendidos en todo momento por tres adultos: un profesor, y dos ayudantes.
La jornada aparece planificada en cada una de las aulas y es fácilmente reconocible por el alumnado a través de pictogramas. De igual forma, al principio de cada sesión el profesor detalla el orden de las actividades que van a realizar, para garantizar el seguimiento de la misma.
Se trabaja mucho con el refuerzo positivo, hemos oido en innumerables ocasiones frases como: “Good Job! Wonderfull writing! Well done!” Y NUNCA hemos observado presión o enfado hacia alguna respuesta, gesto o actitud inadecuada. Hemos visto una paciencia, una comprensión y un cariño constantes durante toda nuestra visita.
El equipo educativo conoce perfectamente las necesidades de cada alumno y su ritmo y trata de no precipitar conductas ni aprendizajes. Atienden a su estado emocional en cada momento y para ello la principal premisa adulta es también la paciencia. En este sentido nos ha llamado también la atención la presencia de espacios aislados en las aulas para todo aquel que quiera estar solo haciendo sus “cosas” (jugar con plastelina, escribir una historia, visulaizar vídeos...).
- El uso de animales domésticos cobayas, gallinas y “Chica” la perrita del centro.
- Las clases de estimulación sensorial para que el alumnado centre la atención.
- La presencia de alumnos mayores como ayudantes del profesor, logrando un refuerzo positivo tanto para él mismo como para el grupo.
- El “reward time” la última media hora de la jornada; dedicada a que cada alumno reciba su premio después de la consecución de los objetivos perseguidos durante la misma. Dependiendo de la edad son los propios alumnos los que lo eligen (jugar a fútbol, juegos con la tablet, dibujos, etc.) siendo un momento también de interacción entre diferentes grupos.
Por último agradecer al centro “The Mendip School” la buena organización de la jornada, disposición de profesores y ayudantes y sobre todo la acogida del alumnado que nos ha llegado al corazón que es la mejor arma que poseemos para conseguir todo aquello que nos propongamos.
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